Un enorme parque arbolado rodea el palacete y los jardines que se mandó construir en el siglo XVIII para el entonces Príncipe de Asturias, Carlos IV. El conjunto está cerrado al tráfico con una enorme tapia de piedra. El paseo central, el que desemboca en el palacete está asfaltado y transcurre entre una doble hilera de árboles. Los más grandes, pinos y los delanteros, más pequeños, castaños.
*Es una zona muy visitada y muy tranquila para ir con los niños.
*El acceso a La Casita es independiente de la visita a los jardines que la rodean.
*En las fuentes y en el estanque, dentro del jardín de la Casita, nadan carpas de colores. En otoño suele haber patos.
*En primavera, las rosas rojas, blancas y rosadas dan un contrapunto de color a setos y árboles.
*La entrada a La Casita se adquiere una máquina expendedora a la entrada, se paga con tarjeta de crédito.
*Servicios públicos.
*En verano, hay un horario especial para contemplar la iluminación nocturna. Consulten con antelación en la oficina de turismo antes de su visita.
Otras propuestas:
*La Biblioteca del Rey
http://www.ocioenfamilia.com/proc55.htm
*La Herrería
http://www.ocioenfamilia.com/pron86.htm
|